Solo el 17,5% de los fondos disponibles del Perte agroalimentario se han resuelto
Artículo publicado en elEconomista.es por María García Juárez
El Perte agroalimentario está todavía en una fase muy temprana de su ejecución y las convocatorias abiertas o resueltas solo abarcan el 17,5% de los fondos disponibles, según un informe realizado por la consultora Llorente y Cuenca (LLYC). Dentro de la partida de 1.002,91 millones de euros, las convocatorias resueltas o cerradas en proceso de evaluación son solamente un 9,9% del total, y las convocatorias abiertas representan el 7,7%.
Se estima que un 40% de las convocatorias pendientes se resuelvan en el corto plazo y están relacionadas con el eje 1 (fortalecimiento industrial del sector agroalimentario), cuyo importe asciende a 400 millones de euros. Estas ayudas tendrán un carácter mixto (préstamos y subvenciones) y se primará la organización de las empresas, sobre todo, desde el informe de LLYC destacan «el protagonismo de las pymes, la implantación territorial de las actuaciones y los requisitos que las agrupaciones empresariales».
El Gobierno incrementó en 800 millones de euros el presupuesto del Perte. Estos fondos adicionales se centrarán en dos áreas: transformación de la industria agroalimentaria: con una dotación de 400 millones de euros y será gestionado por el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo (MINCOTUR). Por otro lado, se mejorará la gestión del agua y la modernización de los regadíos: con una dotación de 400 millones de euros y será gestionado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA).
El Sector Agroalimentario en España
El sector agroalimentario representa un 10% del PIB español, y mueve alrededor de 60.000 millones de euros en exportaciones. Este sector cuenta con más ayudas aparte del Perte agroalimentario, como son los fondos complementarios o la Política Agraria Común (PAC).
El Perte fue aprobado en febrero de 2022 por un valor de más de mil millones de euros, aunque en mayo se amplió el presupuesto a 1.800 millones de euros, para tratar de mejorar la competitividad, la sostenibilidad, la trazabilidad y la seguridad.
Las perspectivas del Perte para el segundo semestre de este 2022 y para el año que viene son muy positivas. Sin embargo, «directivos y responsables patronales coinciden en que el dinero apenas llega al terreno, al menos de momento, y muestran cierto escepticismo sobre su impacto final si la situación no mejora en breve», según el estudio ‘Soberanía alimentaria y revolución verde’ también de LLYC.